El hecho se registró el viernes, luego que un grupo de trabajadores artesanales intentara destruir una embarcación proveniente de Coronel, y luego atacara a golpes a las personas a bordo.
Un violento episodio se registró el viernes en Arica, luego que pescadores provenientes de Coronel fueran agredidos por sus pares de la zona, quienes los acusan de utilizar sus puestos de trabajo y además, hacerlo de forma ilegal. El hecho quedó registrado en un video de casi dos minutos y medio, donde se observa como la embarcación «Odiseo II» fue abordada por varios pescadores artesanales quienes comienzan a intentar destruirla, para luego obligar a descender a las personas a bordo.
Una vez que los dejaron en el muelle, comenzaron un enfrentamiento verbal que terminó con golpes de puño e incluso con palos. Además, algunos de los sujetos que participaron de la agresión lo hicieron cubriendo su rostro con pañuelos. A raíz de ello, personal de la guardia marítima de Arica llegó para intentar controlar la situación, mientras que la Gobernación Marítima regional confirmó haber tomado conocimiento de lo ocurrido. El conflicto, según denuncian los propios pescadores de Arica, tiene relación con el supuesto uso «ilegal» del puerto en cuestión por parte de los pescadores provenientes de Coronel. Además, acusan que existen otros problemas asociados, como grandes embarcaciones que están desvedando las playas, y las extensas jornadas de trabajo que realizan. Estos hechos, además, habrían motivado una serie de protestas y barricadas a las afueras del terminal pesquero de Arica. Según explicó a La Estrella de Arica el presidente del sindicado independiente de pesca artesanal de Coronel, Manuel Gutiérrez, «los pescadores son de la caleta Lo Rojas, pero la embarcación hoy en día es nortina, y está trabajando para un armador en el norte». El también miembro del directorio de la Corporación de Defensa del Patrimonio Pesquero de Chile (Condep), tildó de «terrible» que se enfrentan entre compañeros que buscan ganarse la vida, y precisó que «la cosa en la zona es complicada, las cuotas de pesca son pequeñas en la región y son muchas las embarcaciones que hay, entonces la cuota se reparte entre mucha gente, lo que implica muy poca ganancia en una temporada de trabajo». Distintas versiones también apuntan a que serían las propias condiciones de la ley de pesca -tanto en cuotas como en las características de la labor-, las que estarían propendiendo a que ocurran este tipo de hechos violentos y protestas asociadas. De acuerdo a Gutiérrez, urge que se pueda «terminar con la inamovilidad de los pescadores artesanales, necesitamos que ellos se puedan mover como cualquier ciudadano que pueda ir a trabajar donde se les ocurra o donde sienta mejor valorado o pagado». Por su parte, el presidente de la Federación Nacional de Sindicatos de Pescadores artesanales de Chile, Hernán Cortés, sostuvo al medio SoyConcepción que todavía están recabando antecedentes sobre el hecho, sin embargo, explicó que el conflicto tendría relación con que «los pescadores de allá (Arica) no quieren que los pescadores de acá (Coronel) vayan a ‘quitarle el trabajo’, poco menos y como hoy día la Ley de Pesca restringe la movilidad de los pescadores entre regiones, cosa que no debiera ser porque es inconstitucional, lamentablemente ocurren estos hechos».